Ya hemos presentado los avances que hemos realizado durante la primera evaluación para la asignatura de Empresa e Iniciativa Emprendedora sobre nuestro proyecto apícola “Los Casiellos”.

Ha sido un largo camino en el que hemos ido sorteando el obstáculo de la total inexperiencia sobre los pasos a dar para crear una empresa desde cero. Sin embargo ha sido un camino en el que hemos aprendido muchas cosas.

Desde que se nos presentó el cuaderno con la guía elaborada por Valnalón para los alumnos de esta asignatura, el cual al principio nos abrumó, y hasta el día de hoy, hemos tenido que aprender sobre la marcha e ir dando pequeños pasos.

El primer paso que dimos fue elegir el tipo de empresa que queríamos hacer. No fué dificil, pues nuestro interes personal por la apicultura nos dejó muy claro ese paso.

Después hablamos con uno de nuestros profesores para intentar concertar una entrevista con un gran apicultor de Cantabria, con la intención de que nos diera toda la información posible sobre el negocio. Para ello nos tuvimos que desplazar hasta la comunidad vecina aprovechando una feria apícola donde dicho apicultor iba a dar una charla. Allí contactamos con él y se ofreció para dedicarnos una tarde entera a solucionar nuestras dudas. Pero para ello deberíamos esperar un mes debido a la saturación de trabajo que tenía en ese momento.

Esta oportunidad de oro no la podíamos dejar pasar, y nos volcamos totalmente en la elaboración de un cuestionario con todas aquellas dudas que teníamos sobre la apicultura a nivel técnico, logístico, de marketing y sobre la clientela, la distribución y las ventas. Estuvimos todo el mes pensando y elaborando el cuestionario.

Mientras tanto, pudimos hacer otras cosas como asistir en Valnalón a una charla sobre financiación de empresas a cargo de Triodos Bank, y de un joven cantautor que nos habló sobre el crowdfunding. La charla fué muy interesante y nos dimos cuenta de que nuestro proyecto estaba entre los tipos de proyectos que Triodos Bank financia. Un punto a nuestro favor.

También seguimos trabajando en otros aspectos del proyecto, investigando y desarrollando diferentes apartados del mismo.

Paralelamente, hemos buscado colaboradores externos que son profesionales dentro del sector de la Televisión, para que nos ayuden con nuestro logotipo de empresa y el vídeo que tenemos que desarrollar para el proyecto. Ahora contamos con un realizador de TV con amplia experiencia profesional que será el encargado de diseñar los bocetos del logotipo y los grafismos del vídeo, y de una redactora y locutora, filóloga de español, que realizará el texto y la locución de dicho vídeo, además de supervisar nuestro proyecto a nivel semántico y gramatical.

También asistimos a la charla que Alberto Uria de “Miel Outurelos” dió en nuestro instituto sobre comercialización de productos, y sobre los problemas que él tuvo cuando empezó en este negocio.

Con Manuel Barquin en Cantabria.

Finalmente acudimos a nuestra cita con Manuel Barquin, el apicultor cántabro, que a lo largo de cinco horas resolvió con paciencia nuestras dudas además de darnos muchísima y valiosa información. Contar con una colaboración así es todo un lujo, y nos sentimos muy afortunados por ello.

Durante la última semana, hemos estado trabajando en la maquetación del proyecto y haciendo los últimos retoques antes de presentarlo para su evaluación por parte de nuestra profesora.

No por eso, y pese al parón navideño, tenemos pensado dejarlo de lado. Ya tenemos planes para avanzar en el proyecto durante las inminentes vacaciones de Navidad. La  finalización de las clases nos dejará tiempo para visitar lugares que en periodo lectivo no podemos visitar, por tener que asistir a clase.

Estamos muy ilusionados con este proyecto que pensamos hacer realidad cuando acabemos el ciclo formativo, concertando una entrevista en el Semillero de Empresas de Valnalón, para que nos asesoren en todos aquellos puntos que necesitemos reforzar o desarrollar más a fondo.

Hasta entonces nos quedan tres meses por delante para finalizarlo, y mucho trabajo por delante. Pero eso lejos de desanimarnos, nos impulsa a seguir adelante, ya que somos conscientes que todo ese duro trabajo que nos queda por hacer, es necesario para no dejar ningún cabo suelto en el proyecto, y poder tener las más altas probabilidades de llevarlo a buen término con garantías de éxito.

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